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FIESTA DEL CENTRO DE ENSEÑANZA BÓVEDA
Ayer, día 5, celebró su onomástica el director del Centro de Enseñanzas Bóveda, don Vicente Bóveda Iglesias. Con este motivo, sus alumnos, ex alumnos y simpatizantes, siguiendo el ejemplo de años anteriores, organizaron varios actos en su honor, actos que revistieron entusiasmo y simpatía por la persona a quien eran dedicados. Porque Bóveda es popular, no tan solo por su personalidad en la enseñanza sino también por su hombría, y no exclusivamente entre los escolares sino en toda la población orensana.
A las nueve y media de la mañana, como principio de fiesta, hubo una misa en la iglesia de los PP. Franciscanos, oficiada por el profesor de Religión del Centro, don Domingo Gómez, y armonizada magistralmente por el señor Fernández Vide y un coro compuesto por alumnos,
Más tarde, de once a una y media, se celebró el gran festival artístico en el Teatro Principal.
Primeramente, habló el profesor del Colegio, don Raúl González, en breve pero sentida salutación, exponiendo el significado de los actos y valiéndose de un cuento afortunado, parábola simbólica e intuitiva, hizo ver a los alumnos la gratitud debida a sus educadores, gratitud que ha de perdurar toda la vida. Los oyentes premiaron con fuertes aplausos su oración.
A continuación, don Isidoro Guede, trazó en pocas frases una magnífica semblanza de los Hermanos Villar, que fueron sus profesores y profesores también de un sinnúmero de alumnos que hoy ocupan puestos destacados en la sociedad. En un par de anécdotas puso de relieve el desinterés financiero de estos dos hermanos, cuidadores únicamente del éxito de sus discípulos y olvidando, casi siempre, la parte económica de la enseñanza. Fue muy aplaudido.
Seguidamente se pasó a la distribución de diplomas de mérito y de tenedores de libros.
Y, por fin, la parte representativa.
El cuadro de declamación de la Academia, muy bien ensayado y dirigido por el ex alumno Mario Ángel Varela, puso en escena, primero, la obra “Vaya volantes”, original de Alberto Vilanova, ex profesor del Centro, y, luego, el sainete cómico “Asesinotazo”, inédita y original de la pareja “Quevá”.
Los actores se superaron en su cometido; Fernando Quesada, que es, además de buen futbolista, un excelente actor cómico; Luis Pazos, magnífico de gesto y de dicción; José L. Iglesias, José Valín, Carlos Juiz, todos estupendos intérpretes en sus papeles respectivos.
Los intermedios musicales de Ruiz Quintana, Bobo Muñiz y Manuel Álvarez, fueron escuchados con religiosa atención y premiados con estruendosos aplausos.
Por la tarde, en el Estadio del Couto contendieron dos equipos de la Academia, disputándose un artístico trofeo.
Al finalizar los actos, muchas personas, alumnos, profesores y amigos acudieron a casa de don Vicente Bóveda para felicitarlo personalmente.